75 aniversario de la II República Española

El pasado 14 de abril se conmemoró tímidamente el 75º aniversario de la proclamación de la II República española y se homenajeó a aquellos hombres y mujeres protagonistas de esa etapa de la historia.

Con motivo de esta efeméride, diversas asociaciones y colectivos encabezados por la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica y la Fundación Contamíname, han programado una serie de actos interesantes y han promulgado un manifiesto en favor de los valores democráticos de la II República que pueden suscribir en la página web http://www.memoriadelfuturo.org/manifiesto.html

A lo largo y ancho de la geografía española se han ido sucediendo esta semana pequeños homenajes a los republicanos perseguidos y represaliados tras la guerra. Para algunos, esta conmemoración y el reconocimiento de aquellos republicanos que sufrieron durante la guerra y la dictadura, es una provocación... para otros se trata del reconocimiento que la historia de este país les había negado hasta ahora. Después de 75 años, ya era hora.

El Presidente del Gobierno, el pasado mes de febrero anunció que el Gobierno enviaría a las Cortes Generales, antes del verano, un Proyecto de Ley de la Memoria Histórica, en el que se regulen las medidas necesarias para ofrecer un adecuado reconocimiento y satisfacción moral a las víctimas, de toda índole, de la Guerra Civil y del régimen franquista.

La Comisión Interministerial para el Estudio de la Situación de las Víctimas de la Guerra Civil y del Franquismo, creada por Real Decreto 1891/2004, de 10 de septiembre, ha estado manteniendo reuniones con más de medio centenar de Organizaciones y Asociaciones vinculadas, de un modo u otro, con víctimas de la guerra civil y del franquismo y con movimientos de recuperación de la memoria histórica para preparar las bases del Proyecto de Ley.

Está claro que nunca llueve a gusto de todos, pero la represión durante la Dictadura fue un hecho, y nadie les ha reconocido a esas víctimas sus sufrimientos. En las guerras se mata y se muere, pero en la postguerra se reprimió a quienes ya no podían defenderse.